ARRABAL!

“Quiero ser un santo pagano”

Fernando Arrabal.

http://es.wikipedia.org/wiki/Fernando_Arrabal

“Continuaré sirviendo al arte y a la literatura españolas con mis obras de poeta, es decir que continuaré defendiendo la libertad”

Proceso contra Arrabal,1967.

Entrevista con Jesús Quintero.

http://www.youtube.com/watch?v=N34mEOok_2Q

El Sanedrín juzga a Arrabal.

http://www.youtube.com/watch?v=YJp9J6CwtAc

“No he entendido nada” (Lerdo 1),

“¿Cabe la posibilidad de que Arrabal sea buen actor?” (Lerdo 2).

Una prueba de que la tragedia española continúa es que Fernando Arrabal sigue viviendo en París. Una persona tan honorable, víctima de la verdad como él mismo dice, no puede volver aún. Nacido en Melilla en 1932 su vida está cosida a los momentos más transcendentes de este país en el último siglo. Su padre, militar de la guarnición de esa ciudad norteafricana, fue puesto en la tesitura de aceptar el “alzamiento nacional” el día 17 de Julio de 1936, el verdadero inicio de la Guerra Civil, y no el día 18, como queda dicho en muchos libros. Por lo visto le dieron diez minutos para pensarlo: o Franco o la muerte.

Eligió la lealtad a las leyes vigentes en ese momento, es decir, la República, por lo que fue condenado a muerte aunque después se conmutase la condena por cárcel de la que se fugaría, perdiéndose todo rastro de él. Fernando Arrabal recuerda de su padre un día que jugaba con él, enterrándole sus piececitos de cuatro años, en la arena de la playa de Melilla.

La historia de España le marcará de forma brutal: el 17 de Julio de 1936 está en la base de su obra. A los diez años gana el concurso nacional de superdotados, inteligencia que empleará siempre en la búsqueda de su padre, es decir, la búsqueda del honor, la verdad y la libertad. Quiero ser un santo pagano, como mi padre, repite.

A los 23 años abandona España para instalarse en París, donde vive desde entonces, al no encontrar traza alguna del alma de su padre en la franquista patria. ¿Cómo quedarse a vivir en el ambiente fétido de los traidores a su infancia?. Por accidente buscará siempre la España que nunca ha existido, la España de la libertad en todos los aspectos, la que no existió ni siquiera en tiempos de la II República. ¿Puede haber mayor patriota?. Él nunca regresó cuando se perpetró la llamada Transición a la Democracia, realmente Pantomima a la Oligarquía.

El dramaturgo más representado del mundo del año 1969, una docena de novelas, un centenar de obras de teatro, siete películas – entre ellas Viva la Muerte – y un largo etcétera. Legión de Honor en Francia, algún día le darán el Nóbel.

Creador del Movimiento Pánico, junto con Jodorowsky y Topor, en 1962, partiendo del surrealismo y con conexiones con el dadaísmo pero con senda independiente, camino propio.

¿Qué es el Movimiento Pánico?. Una teoría del Universo y del papel del Hombre dentro de él. Apelación al dios Pan (todo), uso del terror, el humor y la simultaneidad para sacar al hombre de lo estático, lo católico, la obediencia ciega y sumisión a la jerarquía de poder, lo judío, lo lineal, de determinado. La vida es dinamismo en equilibrio, autoorganización, autoconocimiento. Se puede temporalmente alinearse por tal o cual postura, pero adherirse de por vida a una relación de poder para asegurar la tranquilidad del enchufado, de lo estático, del cementerio, de lo monárquico-oligarca, dejarse sodomizar por lo juancarlista, por lo teófilo, por lo televisivo, es la muerte a la española, es la muerte que se viene repartiendo en España desde hace tanto tiempo.

Nadie ganó la Guerra Civil. No la ganó nadie, la ganó la Muerte. La muerte de los que murieron, la muerte de los que se quedaron. Cuarenta años de muerte – como el deambular del pueblo israelita por el desierto – más treinta años añadidos de Juicio Final, una pseudodemocracia donde unos oligarcas aprovechados, que traicionaron sus ideales, todos, desde los comunistas pasando por los socialistas hasta los sonrientes y engominados cachorros de Fraga, ejecutan una obra de teatro cuyo libreto se llama “todo está atado y bien atado”. Simplemente se aprovecharon de que era un país de fantasmas y moribundos, que conectaron a los aparatos receptores de televisión y que bailaban al son de las antiguas Leyes del Movimiento con el movimiento espasmódico propio del monstruo de Frankenstein mientras perseguía el coñote de la rubia nórdica según San Esteso, prohibido antes por la romana jerarquía.

No nos damos cuenta, pero estamos todos muertos, como en el telefilme Los Otros, o por lo menos habitamos en algunos de los niveles de los infiernos de Dante, no sé si en el juancarlismo, el socialismo obrero español, los andalucistas o en el visionado masivo de catódicas imágenes. Arrabal escapó de la muerte en el año 55. Dejó atrás el Viva la Muerte en su querida España y eso que ya hacía mucho que había acabado la guerra.

Hoy relativa poca gente conoce a Arrabal en España, y la mayoría de ellos es debido a una borrachera antológica, pánica, la primera de su vida, cometida a los sesenta años en la Televisión Unidireccional Española, heredera directa y actriz puta del franquista “atado y bien atado”.

Secuencia prostituida con unas risas fantasmagóricas.

http://www.youtube.com/watch?v=ZpGJSwkmnR8

Secuencia original.

http://www.youtube.com/watch?v=xVMSrqtsAow

La minoría silenciosa, la que aún entonces, hoy, siempre, sobrevivirá a pesar de las costras de muerte, reinado y televisión; una minoría silenciosa que guardó, en simas nacionales, en páramos extranjeros, los fundamentos dinámicos de la vida.

Arrabal borracho en el vientre de la Gran Prostituta con la emoción de no saber si queda alguien vivo – pocos, deben ser minoría y ser silenciosa, ¡ser votantes incluso! – en el país de su infancia.

Arrabal descalzo en el prostíbulo nacional, con la emoción ahogada en dos copas de más por si su padre-libertad le viene a enterrar sus piececitos de cuatro años en la arena de Melilla.