Querido Pered:
Completamente de acuerdo contigo. En un país lleno de sinverguenzas y de traidores a la lealtad, a la ética y llenos de cobardía, es muy sano saber que hombres como don Antonio existen.
Si los integrados en el movimiento antiglobalización, que denuncian aspectos denunciables sin ofrecer demasiadas alternativas, afirman que Otro mundo es posible, nosotros podemos afirmar que Otro hombre es posible, porque ahí está el ejemplo de D.Antonio.
Un hombre que centrado en la Lealtad, apoyado en la Ética y la Valentía, irradia Sentido Común que nutre a los diferentes tipos de Inteligencia y que le eleva, y con él al MCRC, cristalizado en el Diario Español, hasta la sociedad política.
Una sociedad política que por ahora sólo se habla habitada por el núcleo corrupto del Estado de Partidos, con los medios de comunicación custodiándola, y el prístino Diario del MCRC a una distancia interestalar, demostrando la posibilidad de vida en los territorios libres de la sociedad política, absorbida su vida,su verdad y su libertad, por el núcleo corrupto y pesado, como un agujero negro, del Estado de Partidos.
Usando terminología astronómica, el tubo de gusano creado por el MCRC (liderado por el heroico D.Antonio, desde los territorios exiguos y libres del tercio laocrático de la sociedad civil hasta los ignotos territorios completamente deshabitados -fuera del núcleo corrupto- hasta ahora de la sociedad política) tiene una importancia fundamental.
Cuando llegue la Primavera del tiempo y del hombre, y vengan con capazos y urnas a recoger la cosecha de la fruta y del súbdito voluntario, el hombre perplejo ante tanto vapuleo mediático y ante tanta burla ofertista, podrá mirar el cielo la estrella de la Libertad, podrá ver elevarse un surco de luz de tamaño humano, signo de la victoria del hombre ante las fuerzas centrípetas que nos quieren inmolar en el Estado de Partidos.
El idealista encontrará refugio y cobijo, y no andará arrollado por tanto bólido medrador embarcado en las raudas lanchas de las palabras huecas de la solidaridad, la tolerancia y el consenso.
El idealista podrá ver una idea triunfante en el cielo de la libertad, y vestirá su cuerpo y su mente por las humanas ropas que la escala de valores le brinda en su ascenso por el camino marcado en esta singular escala de Jacob.
La otra escala, la que le sumerge en el Estado, le ofrece podredumbre y olvido tras unas primeras etapas pastoriles de tolerancia y consenso.
Usted nunca caminará sólo, D.Antonio. Una vez aspirado el aire de la libertad, que ya fluye a borbotones desde la brecha abierta por el MCRC en la sociedad política, nada ni nadie vuelve a ser igual.
Yo también siento la necesidad de ofrecerle mis respetos,quizás unido a un sentimiento de dignidad general que sin duda tienen los españoles pero que se encuentra atrofiada porque no saben lo que hacen, porque no sabíamos lo que haciamos. A unas generaciones nadie les contó nada,a otras generaciones todos nos contaron todo.
Me pregunto si no debió sentirse doblemente encarcelado en Carabanchel junto con los comunistas, por una parte por la mutación transición-oligarquía, carnalizada en ese momento por Fraga, y por otra por la sociedad civil, que sin duda no le comprendió porque no sabían nada.
Viva la República Constitucional.Viva España.
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