La Audiencia Nacional ha condenado a 47 miembros de KAS (Koordinadora Aberztale Sozialista), EKIN (organización de origen universitario nacida en los años 50) y SAKI (encargada de las relaciones exteriores del entorno aberztale) a un total de más de 500 años de cárcel, por considerar que estas organizaciones forman el corazón y las entrañas de la propia ETA.
La lectura del fallo ha sido accidentada, con desalojo de la sala, gritos y cánticos incluidos. Antes de abandonar la sala, la procesada Teresa Toda dijo no aceptar la sentencia por tratarse de un juicio político.
Y de un juicio político se trata, como todos los procesos de esta Partitocracia, donde el poder judicial y el ejecutivo convergen en el legislativo, en el teórico plano político, reduciéndose los tres poderes al estrecho redil de la corrupción.
En el Estado de Partidos, dentro del circo creado por el redil financiero y mediático, existen tres conjuntos inconexos, la clase política oficial, las organizaciones que rodean a la banda terrorista ETA y la clase mediática que chapotea en el enclave de la telebasura, especie de Senado popular formado por programas con comentaristas en corro, válvula de seguridad de una parte de la sociedad civil que ven en estos periodistas del corazón un sustituto al natural sentimiento de falta de representación. ¡Qué hablen de nosotros, de nuestros asuntos, de nuestras mollejas o siliconas, pero que alguien hable de nosotros!. En este sentido, telebasura y terrorismo comparten ciertas características comunes: ambas son formas cancerígenas de representación de la sociedad civil; la primera consigue llegar a representar a un grupo de personas mediante la extorsión y el asesinato, la segunda consigue "representar" a otra masa de personas mediante la denigración de la moral y el abandono de todo principio y valor: los inmorales políticos, que no saben que lo son, no permiten, cínicamente, que en su redil habite forma alguna distinta a ellos que pueda tener "moralidad".
La clase política oficial, formada por los partidos con sello de calidad monárquica, y más concretamente, el actual gobierno socialista, intenta sacar rédito electoral de la fagotización de esa otra clase política alternativa, la aberztale, que tanto sirvió en otras épocas para polarizar a la clase oficial y legitimar pactos. Pero el actual gobierno, con una crisis económica galopante, y con un nerviosismo creciente por las encuestas, ha decidido quemar sus últimos cartuchos arremetiendo con toda una estructura política (KAS, EGIN, SAKI y la Fundación Joxemi Zumalabe), que si bien cuenta entre sus estrategias el recurso de la violencia, no es de naturaleza distinta al Régimen de Partidos, a la falsa democracia que lo condena.
Son dos mundos iguales, uno más grande y con más sellos oficiales, con la violencia subcontratada, otro mucho más pequeño y echado al monte. Los dos ignorantes en grado sumo de lo que es democracia.
En el día de ayer se rompió el eterno equinoccio, la duración igual del día (parlamentarios o sea) y de la noche (terroristas y tal), para beneficio electoral de los primeros, que canalizan la satisfacción becerril y el cabreo cabronil de la decisión hacia algunas de las colas electorales donde se rinde la libertad colectiva.
El mundo aberztale emplea la violencia porque es el único medio de subsistir dentro del podrido mundo de la democracia actual, lo cual no justifica en modo alguno su empleo, pero descubre el estado de corrupción de toda la estructura, que sólo confía en la acción policial para acabar con una opción política que se vería en gran parte diluida en sus planteamientos extremos, si tuvieran,¡ si alguien tuviera!, representación y libertad política en este país.
ETA es el cáncer dentro del cáncer del actual Régimen de Partidos. Para acabar con ETA aquí que aplicar la quimioterapia de la libertad política, de la libertad colectiva. La Tercera República. Una Asamblea Nacional formada por los representantes de cada mónada, un sistema electoral mayoritario, a doble vuelta y con mandato imperativo – el representante es sustituible en cualquier momento desde los órganos de control de cada mónada -, un presidente elegido directamente por los electores, ¡quizás no perteneciente a ningún partido¡ ¡quizás un presidente vasco o catalán¡.
Contra ETA, EKIN, PSOE, SAKI, PP, IU, EGIN, El País, Ciu, PNV, la pomada de la libertad, la medicina de la República Constitucional.
Que cambien ellos o que mueran, al igual que cambiamos y morimos nosotros. Esto no es el fin de la Historia, esto no acaba más que empezar.
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