13 sept 2011

La cuarta generación, por fin?

Los teléfonos inteligentes (smartphones) y las tabletas requieren conexiones a Internet igual de rápidas que las fijas. Telefónica y Vodafone lo saben y van a lanzar casi al unísono los primeros servicios de LTE (Long Term Evolution), la llamada cuarta generación de la telefonía móvil, que permite conexión a Internet a velocidades medias de 30 megabits por segundo (Mbps) aunque con puntas que sobrepasan los 100 megas. Ambas compañías realizarán su lanzamiento "precomercial" (tras las pruebas piloto) para grandes clientes, empresas y Administraciones Públicas, aunque solo para aparatos móviles con módems USB, ya que aún no hay teléfonos en el mercado que soporten estas velocidades. Telefónica dará el pistoletazo de salida la próxima semana en Madrid y Barcelona, y Vodafone lo hará a finales de mes en esas dos ciudades y en Málaga, para 30 grandes empresas. El despliegue de red se hará sobre la banda de 2,6 GHz, disponible tras la subasta de espectro que tuvo lugar el pasado mes de julio, aunque el espectro óptimo es el de 800 MHz, si bien esta banda solo podrá usarse a partir de 2014. Telefónica estima que esas y otras cuantiosas inversiones son necesarias si se quiere asegurar el objetivo de ofrecer 30 megas en 2020 a toda la población, tal y como dicta la Agenda Digital Europea. Pero también reclama que tengan un retorno y no ceja en su empeño de cobrar en la Red según lo que se consuma y el tipo de contenido que viaje por ella, tanto a los particulares como a los proveedores de servicios como Google o Facebook, en el llamado "mercado de doble cara". Este es un nuevo término que acuñó el consejero delegado de Telefónica, Julio Linares, con el que, en la práctica, se rompería el principio de neutralidad de Internet. Linares, en el XXV Encuentro de Telecomunicaciones de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander, aseguró que en los últimos cinco meses un total de 40 empresas, entre operadoras de telecomunicaciones, proveedores de servicios de Internet y empresas de contenidos, han llegado a un "consenso bastante avanzado" sobre un nuevo modelo para repartirse el pastel del negocio online. Las firmas han presentado a la Comisión Europea 11 propuestas para un "modelo sostenible" de negocio mediante "la gestión diferenciada del tráfico de forma transparente" que Linares denominó como "mercado de doble cara". Se trataría de poder diferenciar, por un lado, la gestión del tráfico por cada usuario y cobrarle según sus necesidades (volumen de descarga, tipo de contenidos, calidad conexión, etcétera) y, por otra, segmentar también a los proveedores de contenidos (Google, Yahoo, Facebook, etcétera) y cobrarles de forma diferenciada. Las operadoras aún contemplan atónitas el efecto de aplicaciones como WhatsApp, el servicio de mensajería instantánea multiplataforma, que, según Linares, "canibalizan" el tráfico (y el negocio) de los operadores móviles: solo el 30% del tráfico de datos generado desde los teléfonos inteligentes va por redes móviles, el resto viaja por wifi a través de redes fijas. El ejecutivo expuso que los smartphones, tabletas y otros aparatos inteligentes combinados con las redes sociales se han convertido en el "quinto poder" de nuestros días, y provocan una verdadera revolución tecnológica y sociológica. "En el 28% de los casos, las tabletas sustituyen a un ordenador personal y en el 80% de las ocasiones se utiliza la tableta en casa", argumentó Linares. Otra revolución, aunque en este caso para los consumidores, puede venir de la mano de la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT). El regulador se plantea dar libertad a Telefónica para fijar la cuota que pagan alrededor de 14 millones de abonados todos los meses para el mantenimiento de la línea de teléfono. Esta cuota es la única tarifa telefónica minorista que está regulada y desde 2009 se encuentra congelada en 13,97 euros al mes (más IVA). El efecto para el abonado final dependerá de la postura que adopte Telefónica. La operadora, que domina el 50% del mercado de conexión a Internet en España, puede jugar con este precio, bajándolo o subiéndolo, o incluso podría plantearse eliminar la cuota incluyéndola dentro de la tarifa plana. (ElPais.com, 6/9/11)

No hay comentarios: