12 jul 2012

Reconversión!. Plus Ultra







Los partidos lo llenan todo (Amando de Miguel)
Vivimos en un continuo consenso entre los dos partidos

Llega la hora de la verdad, llega la hora de la libertad. La sociedad civil, que nace, que despierta de una pesadilla de almibar y de palabras huecas, se llena día a día de ciudadanos conscientes de la situación, comprendiendo que la actual crisis española tiene un plus de peligrosidad, un pedigrí propio de rancio abolengo de corrupción y de mentira. Ha llegado la hora del cambio, ha llegado la hora del despertar, de la toma absoluta de conciencia que cristaliza en la acción.

Queremos una nueva constitución, un periodo constituyente que traiga la verdadera democracia a este país. Una democracia que defienda los derechos y señale las obligaciones del individuo, que le dote de la libertad política usurpada desde siempre por este Estado de Partidos y que eleve la meritocracia al lugar que se merece. Que alcance el individuo el lugar que tiene que alcanzar, su máximo potencial, su cota más alta que es donde debe habitar la sociedad civil. La sociedad civil como máximo, y no como mínimo.

 La llama encendida principalmente por el MCRC hace años, prende ahora por doquier en multitud de personas que anhelan un cambio de rumbo. España tiene la oportunidad única de dar ejemplo de cómo se levanta un país de los suelos adonde ha caído. Pero a España no la levantan los políticos, súbditos de una democracia hermafrodita y alejada de la realidad, a España no la levanta un sistema financiero que se ha dedicado a la pesca de hombres mediante la elegante y masiva entrega de créditos y que ha alimentado la burbuja. A España la levantan los españoles libres, porque eso es España, un territorio yerto allende los mares y vacia de hombres y mujeres libres. No se levanta porque todos somos esclavos. Esclavos de un Estado que se dice democrático y que junto con el sistema financiero ha creado la mortaja de esta momia que hoy día la sociedad española. Esclavos de unas ideas y conceptos de los que se ha retirado el agua y la vida: ya no significan nada de tan manidas como están. Alguien vendió su eterna sustancia, hasta eso se vendió a crédito.

La mentira ha campado a sus anchas durante estos años. La mentira es el cáncer y pilar de este sistema corrupto que ahora se desmorona, porque se ha basado precisamente en eso, en la mentira, la esclavitud intelectual y moral y en definitiva, en la muerte en vida. La mediocridad como valor, el relativismo más absoluto para poder vender hasta las joyas de la abuela, las verdades eternas que apuntalan la vida y las sociedades humanas. España tiene, o puede tener, la misión histórica de transcender, de superar viejas ideologías que encorsetan al individuo, pilar fundamental de la sociedad civil. Más alla de la izquierda y la derecha. Más allá del progresismo y el conservadurismo. Innovemos en política ya que no tenemos dinero, hoy, para la innovación tecnológica.

Sólo una revolución intelectual en España puede salvarla del abismo que se abre ante sus pies. Contra el antiguo y moderno Non Plus Ultra, del miedo a lo desconocido, Plus Ultra, más allá, que es el lema de España. Inventemos, más allá de Europa, más lejos que América. Más allá.

Creamos en los españoles, en cada español individual, dotémosle de la libertad para desarrollar un potencial que nunca ha sido suficiente liberado. Esa es nuestra principal energía, la fuente no descubierta que esconden nuestros páramos, dehesas, valles, secarrales, suelos calizos y pizarrosos. Viva España, cabrones!. Y cuando digo esto no me refiero a la nación, que está desierta, sino a cada español al que se dice "tú esto no puedes hacerlo" o "esto no se puede hacer" o "esto ha sido siempre así".

Contra la cultura vacuna y pastuense que ha reinado en España desde tiempos inmemoriales, esa cultura que ha confundido a los españoles con los recursos de la Mesta, rebelión, insurreción, insumisión (fiscal), reconversión!

Libertad Constituyente ya!

Adjunto la carta abierta del colectivo Reconversión y animo a todos a que se apunten a la iniciativa.


Carta abierta al Presidente del Gobierno     

                                                                                                   Madrid, 25 de junio de 2012,

Señor Presidente:

La extrema gravedad de la situación económica, moral, social e institucional de España en el momento presente nos mueve a dirigirnos públicamente a Vd., como Presidente del Gobierno. Al hacerlo, partimos del reconocimiento de su voluntad de emprender sucesivas reformas para enfrentarse a los muy diversos problemas de nuestro país.

Pese a ello, nos es obligado constatar la imperiosa y urgente necesidad de que el Gobierno plantee a las fuerzas políticas con representación parlamentaria, y muy especialmente al principal partido de la oposición, un programa integral, coherente y sistemático de reformas, cuyo debate y negociación ofrezca como resultado un gran acuerdo nacional para lograr la “reconversión del Estado”, puesto que en la presente crisis se han hecho enteramente patentes los defectos y carencias de nuestra actual organización política, social y económica, que no derivan sólo de una gestión ineficiente, sino de clamorosos fallos de estructura.

Esta “reconversión” no trataría sin más de corregir y perfeccionar el actual sistema, sino de redefinirlo y reorientarlo a la vista del resultado de su desarrollo, una vez transcurridas tres décadas y media desde su puesta en marcha, y ante las nuevas circunstancias surgidas a lo largo de ese período, en particular, nuestra pertenencia a la Unión Europea y a la Unión Monetaria Europea, con los consiguientes acuerdos y tratados sobre la estabilidad fiscal y presupuestaria plasmados en el recientemente reformado artículo 135 de nuestra Constitución.

Creemos que para ser útil a los intereses nacionales este nuevo pacto de Estado debería restaurar el espíritu del “consenso constitucional” imperante durante la Transición, abordando de modo completo las cuestiones básicas pendientes de solución. Por tanto, ese gran acuerdo ha de referirse a las reformas de la estructura económica de nuestro país y del sistema educativo en todos sus niveles para restablecer la competitividad de la sociedad española en el contexto global, al funcionamiento y composición de los órganos constitucionales (Senado, Consejo General del Poder Judicial, Tribunal Constitucional), a la organización, competencias y financiación de los poderes públicos en sus tres niveles territoriales (Estado, Comunidades Autónomas, Corporaciones Locales), a la extensión y financiación de los servicios públicos, a los instrumentos de participación y representación política de los ciudadanos (partidos políticos, sistema electoral y control parlamentario) y a la posición de España en las instituciones comunitarias en relación al debate sobre el futuro de la unión política, fiscal y financiera, superando así en definitiva lo que ya se reconoce por una amplia mayoría de ciudadanos como el agotamiento de nuestro modelo constitucional.

Es evidente que sin lograr un acuerdo de esa profundidad y amplitud los avances que suponen las reformas en curso serán limitados y, desde luego, no resolverán los muy graves problemas que tiene hoy España, problemas que se agudizarán en el inmediato futuro por la ofensiva “soberanista” que ya se plantea en el País Vasco y en Cataluña y que pondrá a prueba la supervivencia del Estado constitucional. Sin embargo, el mero planteamiento de un pacto político de esta naturaleza, por necesario que sea, no basta para conseguir sus objetivos.

 Es desgraciadamente posible que, a la vista de las divergencias entre las fuerzas políticas con representación parlamentaria, y sobre todo de las posiciones que separan hoy a los dos grandes partidos, no se llegue a ningún acuerdo. De ser así, ni el Gobierno ni el Partido Popular debieran quedarse cruzados de brazos. Además de continuar las reformas necesarias en el ámbito de las competencias del Gobierno de la Nación, existe otra vía para superar esa parálisis: la apelación directa al pueblo español durante esta legislatura mediante la celebración de un referéndum consultivo.

Esta consulta debería versar sobre una trascendental decisión: la reordenación y la racionalización de nuestro sistema político y autonómico y de nuestra estructura institucional para fortalecer la unidad nacional y conseguir la eficiencia y la viabilidad del Estado. Sr. Presidente, estamos seguros de que su patriotismo y su alto sentido de la responsabilidad le harán considerar las ideas que le hemos expuesto.

Confiamos, por tanto, en que ello le anime a adoptar las iniciativas políticas correspondientes para garantizar la unidad, estabilidad y prosperidad de España en esta hora difícil de su Historia.

Reciba, Sr. Presidente, el testimonio de nuestro aprecio y nuestros mejores deseos de éxito en su comprometida misión.

Web: Apúntate a la iniciativa de Reconversión

No hay comentarios: